Un estudio reciente publicado en Nature, sugiere que el consumo de chocolate negro, rico en flavonoides, puede tener efectos beneficiosos a corto plazo en la dilatación de los vasos retinianos, lo que podría abrir nuevas vías en la prevención de enfermedades oculares.
Un reciente estudio clínico aleatorizado y cruzado, publicado en la revista Nature, ha descubierto que el consumo de chocolate negro podría mejorar la funcionalidad de los vasos retinianos.
La investigación, que se llevó a cabo en el Departamento de Oftalmología del Hospital San Raffaele de Milán, Italia, se centró en evaluar los efectos del chocolate negro, rico en flavonoides, en comparación con el chocolate con leche, sobre los vasos retinianos de sujetos sanos.
Impacto del chocolate negro en la dilatación arterial
El estudio involucró a 20 participantes sanos que consumieron 20 gramos de chocolate negro (con 400 mg de flavonoides) o 7,5 gramos de chocolate con leche en dos ocasiones diferentes. Utilizando el Dynamic Vessel Analyzer (DVA), se observó que la ingesta de chocolate negro resultó en un aumento significativo del porcentaje de dilatación de las arterias retinianas en respuesta a la estimulación con luz intermitente, pasando del 2,75% antes de la ingesta al 4,15% después de consumir chocolate negro (p = 0,016). Esta mejora no se observó tras la ingesta de chocolate con leche.
Un estudio reciente muestra que el consumo de chocolate negro podría mejorar la dilatación de los vasos retinianos, lo que sugiere un posible beneficio en la prevención de enfermedades oculares
Aunque no se encontraron diferencias significativas en la perfusión de los vasos retinianos utilizando la angiografía por tomografía de coherencia óptica (OCT-A), el estudio destaca la capacidad del chocolate negro para inducir la dilatación arterial a través de la liberación de óxido nítrico (NO), un potente vasodilatador.
Potenciales beneficios para la salud ocular
Los flavonoides presentes en el chocolate negro son conocidos por sus efectos antioxidantes y antiinflamatorios, así como por su capacidad para mejorar la circulación sanguínea. Los investigadores sugieren que estos compuestos podrían desempeñar un papel en la prevención de enfermedades oculares relacionadas con la edad, como la degeneración macular o la retinopatía diabética. Sin embargo, enfatizan que se necesitan estudios a largo plazo para confirmar estos beneficios en pacientes con enfermedades oculares.
Link al artículo en Nature
