Hasta hace muy poco tiempo, siempre se había dicho que los monstruos eran los encargados de quitarles el sueño a los más pequeños de la casa, ya que eran los principales causantes de que no se pudieran dormir por las noches. Sin embargo, cada vez más son las pantallas y su uso indiscriminado durante la noche las culpables de mantener despierto a los hijos y también a los padres.
Bajo esta premisa, nace la campaña Nuevos Monstruos, en la que se narra la historia de unos monstruos que han tenido que dejar su antiguo trabajo asustando a niños, para buscarse nuevos oficios nocturnos, ya que las pantallas les han dejado sin trabajo.
El vamping -que viene de mezclar las palabras vampiro y texting– consiste en ocupar horas de sueño usando un dispositivo electrónico durante la noche. Se trata de un problema cada vez más presente en nuestra sociedad, ya que 2 de cada 3 padres y madres piensan que sus hijos podrían estar haciendo vamping.
Afectar negativamente a la salud ocular
Además, un 73% de padres y madres cree que el consumo de dispositivos electrónicos, especialmente por la noche y antes de dormir, puede afectar negativamente a la salud ocular de sus hijos. Hay que tener en cuenta que el consumo de pantallas que se realiza en el vamping se hace en condiciones de baja luminosidad, en interior y a corta distancia.
Ante esta realidad y en una Navidad cada vez más digital, en la que 1 de cada 2 niños incluye pantallas en su lista de deseos y 3 de cada 10 obtiene una antes de los 4 años, Multiópticas, bajo su relato en salud ocular Screen Pollution, busca concienciar de la mano de LLYC presentando la campaña Nuevos Monstruos cuyo fin es hacer una llamada de atención, principalmente a padres y madres, sobre la importancia de usar las pantallas de manera responsable.
Seguir concienciando
En palabras de Carlos Crespo, director general de Multiópticas, “la iniciativa ‘Nuevos Monstruos’ es una materialización más de nuestro esfuerzo y compromiso por seguir concienciando acerca de nuestro relato en salud ocular ‘Screen Pollution’. Los datos del estudio revelan que el vamping es un fenómeno desconocido para muchos padres; sin embargo, es una realidad que cada vez está más asentada en los hogares”.
Además, para el proyecto se ha contado con la colaboración de Alicia Banderas, psicóloga experta en adolescencia e infancia, quien asegura que “el vamping conlleva la dificultad en la conciliación del sueño, ya que la luz de la pantalla engaña a su cerebro haciéndoles creer que es de día y no segrega melatonina, la hormona que nos induce el sueño. Todo ello afecta a su descanso y, por tanto, disminuye su rendimiento escolar, así como produce fatiga visual por lo que se recomienda no usar pantallas dos horas antes de irnos a dormir para evitar el insomnio tecnológico. Dormir es tan esencial como alimentarnos de manera saludable. Tener un sueño reparador por la noche nos permite regenerar nuestro cuerpo, que asentemos los conocimientos aprendidos durante el día y mejorar nuestro estado de ánimo fundamental para nuestros hijos y esencial para su crecimiento”.
Las pantallas, los nuevos monstruos de nuestros hijos e hijas
Según datos del estudio Vamping de Multiópticas, casi 9 de cada 10 padres y madres dirían que les preocupa el tiempo que sus hijos e hijas dedican a las pantallas. Sin embargo, más de 6 de cada 10 padres reconoce que alguna vez ha hecho vamping.
Hoy en día, 8 de cada 10 niños y niñas tienen acceso a pantallas a la hora de acostarse. Pasando una media de casi 3 horas diarias mirando una pantalla (PC, Móvil, TV, Tablet, etc.), de las cuales, 35 minutos de media se destinarían a hacer vamping con un dispositivo antes de acostarse. 9 de cada 10 padres y madres son partidarios de limitar de alguna manera el uso de este tipo de dispositivos, ya que un 73% cree que este fenómeno afecta negativamente a la salud ocular.
Que las pantallas no se conviertan en el nuevo monstruo de tu hijo o hija
Como compañía volcada en el cuidado y la preservación de la salud visual, es fundamental poner el foco en la relación que se ha establecido con los dispositivos con pantallas. Por ello, Multiópticas plantea una serie de recomendaciones para que las pantallas se conviertan en el nuevo monstruo de tu hijo o hija:
Evita que duerma en la misma habitación que sus dispositivos electrónicos
Dejándolos fuera nos aseguraremos de que no tengan la tentación de usarlos mientras dormimos.
Asegúrate de que dejan de usar las pantallas 2 horas antes de irse a dormir
Para evitar el efecto de la luz azul sobre la melatonina, que es lo que les mantiene despiertos.
Ojo, que la tele también se considera vamping
Muchos padres tratan de adormecer a sus hijos e hijas poniéndoles la tele… ¡Pero eso solo les despierta más!
Si se desvelan no les dejes usar pantallas
Aunque sea una forma de que dejen de dar la lata solo va a hacer que el monstruo crezca.
Enséñales una buena higiene del sueño
Que nuestros hijos aprendan y practiquen unos buenos hábitos del sueño es clave para que no caigan en las garras del vamping.
Cuéntales un cuento o habla con ellos antes de que se vayan a dormir
Leerles un cuento o comentar qué tal han ido vuestros días es beneficioso para conciliar el sueño.
Y probablemente el consejo más importante: Predica con el ejemplo
Aunque suene chocante, hay más adultos que sufren de vamping que niños o adolescentes.
«Somos el principal referente de nuestros hijos y es normal que imiten nuestros comportamientos. Por ello, concienciarnos y trabajar en que nuestro uso de las pantallas sea responsable puede ser la mejor estrategia para combatir el vamping de nuestros hijos e hijas», concluyen desde la compañía.