Alain Afflelou ofrece diez consejos para cuidar la salud visual

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Hasta el 80% de la percepción que las personas tienen del mundo deriva de las imágenes que captan los ojos. Sin embargo, alrededor del 70% de la población necesita equipamientos ópticos para mejorar la calidad de su salud visual en el día a día y desenvolverse correctamente en el entorno, siendo la miopía uno de los problemas de visión con mayor incidencia*.

De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte de que para 2050, más de la mitad de la población será miope. Por todo ello, el equipo de expertos en Alain Afflelou, comprometidos con el cuidado de la salud visual y con la misión de velar por el derecho de todos a ver bien, comparte los siguientes consejos con motivo del Día Mundial de la Visión, que se celebró este jueves 10 de octubre.

Realizarse al menos una revisión visual al año: aunque no se note ningún signo ni molestia, es conveniente hacer un examen una vez al año para asegurar que todo está bien. Por supuesto, en caso de notar síntomas, como dificultad para ver a determinadas distancias, dolor de cabeza o fatiga visual, se deberá acudir al especialista lo antes posible. Esto es fundamentalmente necesario en el caso de niños y adolescentes. Algo que no siempre es así, ya que según datos recopilados por Alain Afflelou, el 59% de las familias no revisa a sus hijos porque no han manifestado quejas *.

Vigilar la distancia y la luz al usar pantallas: muchas personas se exponen a diario a largas horas de trabajo con el ordenador, tablets o móviles. Esto puede resultar peligroso para la vista en la medida en que no se respete la distancia y no se utilice una luz adecuada. Es necesario que haya entre 30 y 40 centímetros de distancia entre los ojos y la pantalla y no dejar la habitación a oscuras, ya que la luz de la pantalla, junto a la oscuridad del entorno, puede provocar cansancio en los ojos y problemas de graduación.

Hidratar los ojos: para que el ojo funcione correctamente, necesita estar bien hidratado, lo que normalmente se consigue de forma natural con nuestras propias lágrimas. El problema surge cuando la cantidad o calidad de las lágrimas es insuficiente o nos encontramos en ambientes adversos, como espacios con poca ventilación o presencia de humo. En estos casos, es recomendable usar lágrimas artificiales para mantener la hidratación y la comodidad visual, aunque no siempre es necesario.

Usa protección con gafas de sol: el ojo tiene que protegerse del sol todo el año, ya que los rayos ultravioletas pueden ocasionar graves trastornos visuales. Sobre todo, son necesarias en deportes al aire libre o al conducir y es imprescindible adquirirlas en establecimientos homologados y con las garantías de seguridad y calidad mínimas.

Cuidado y mantenimiento de las gafas: se debe revisar el estado de las gafas de manera periódica, ya que puede aflojarse la montura y si esta no ajusta bien, hará que la persona fuerce la vista. Además, los cristales pueden rayarse o deteriorarse y conviene también revisarlos. Es importante, en este sentido, limpiarlos de manera adecuada, con productos de óptica y evitar los remedios caseros.

Extremar la higiene en el manejo de las lentillas: es fundamental mantener limpias y cuidadas las lentillas, pues están en contacto directo con los ojos y estos son muy delicados. Hay que limpiarlas con el producto adecuado y homologado, según el tipo de lente, e intentar dar descanso al ojo unas horas al día y algún día a la semana. Por supuesto, se debe evitar dormir y bañarse con ellas puestas.

Proteger los ojos en determinadas actividades: hay actividades cotidianas como lo son maquillarse, ir a la playa o cortar el césped que pueden provocar la entrada de impurezas o cuerpos extraños en el ojo y ser causantes de infección. Por eso, es recomendable usar gafas de protección y evitar frotárselos para que no entre nada en ellos.

Cuidar la visión a medida que se cumplen años: el envejecimiento lleva consigo también la aparición de determinadas enfermedades visuales u otras que están relacionadas con la visión, como el colesterol, la diabetes o la hipertensión. Por ello, es importante incrementar las revisiones visuales en caso de padecer alguno de estos trastornos.

Seguir una alimentación saludable: la alimentación rica en vitaminas y minerales puede ayudar a cuidar de la salud visual. Más allá de los conocidos beneficios de las zanahorias para la vista, los alimentos verdes como el brócoli, los calabacines o los guisantes, son los más ricos en luteína y zeaxantina, nutrientes esenciales para la salud ocular.

Descansa la vista: sobre todo al trabajar con ordenadores, al leer o al manipular objetos pequeños, hay que intentar hacer pausas y relajar los ojos. Es importante que, cada 20 minutos, se mire al horizonte sin enfocar nada o cerrar los ojos suavemente, sin apretar los párpados, para que descansen un poco.

*Libro Blanco de la Visión 2023, elaborado por la Fundación Visión y Vida.

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