La colección, de estética maximalista, tiene formas extravagantes y se caracteriza por una gran atención a los materiales y a los detalles referentes al estilo.
Los diseños exclusivos expresan el espíritu rockero de la marca; los modelos, cada uno con su propia personalidad, no pasan desapercibidos: gafas de sol y de vista con elementos distintivos y únicos.
La interpretación polifacética del logotipo (tanto en su totalidad como en versión con monograma) es el leitmotiv de toda la colección, junto con otros elementos emblemáticos de la marca, como las calaveras, los cristales y las tachuelas.
La campaña está realizada por el fotógrafo Steven Klein y con el mismo Philip Plein y la modelo y actriz estadounidense Megan Fox como protagonistas.