En 1924 Alberto Prats demostró ser un auténtico visionario, iniciando con un primer taller de óptica en Teruel, lo que acabaría siendo, 100 años más tarde, una multinacional española 100% independiente líder en I+D, servicio y producción automatizada de lentes.
Francisco Prats, consejero delegado del Grupo Prats, y Filipe Pires, nuevo director general nos cuentan las claves de esta historia de éxito empresarial como lo demuestra el hecho de que disponen de cuatro laboratorios y presencia en 22 países.
1920, 1930 una Europa exhausta y una España negra y confusa. La dictadura de Primo de Rivera, la proclamación de la República, Charles Lindbergh vuela sobre el Atlántico sin escalas, se descubre la penicilina… ¿buen momento para pensar en la creación de PRATS?
Francisco Prats. Pues sí… fue en 1924 cuando mi abuelo, Alberto Prats decidió con sus primos montar un taller de fabricación de lentes en Mas de las Matas y a partir de ahí comenzó nuestro camino. Él fue un auténtico visionario, porque realmente trabajaba en el negocio de la fruta, concretamente en el cultivo de melocotones y tras una cosecha especialmente buena, decidió invertir los beneficios en un nuevo sector que intuyó que tendría un gran desarrollo. Aquella primera empresa ha llegado a ser hoy en día una multinacional especializada en la fabricación de lentes oftálmicas de alto nivel. Somos centenarios, ya han pasado 100 años.
Durante un siglo, su empresa ha sido testigo y protagonista de numerosos cambios en el mundo de la óptica y optometría ¿Cuáles considera que han sido los logros más relevantes en la historia de PRATS y como han influido en el desarrollo actual?
Francisco Prats. Los logros y retos que hemos afrontado se refieren sobre todo a los cambios tecnológicos. Empezando desde los años 20, precisamente en 1924, pasar de un ámbito agrícola al industrial sanitario ya supuso un gran hito de superación. En 1956, creamos Meniscos Prats para fabricar lentes de stock, digamos lentes seriadas, lo que suponía un nuevo modelo, el desarrollo de meniscos.
El siguiente hito importante ya en la empresa actual, fue la fabricación de los tóricos cóncavos en mineral. Estamos hablando de hace más de 50 años. En los años 60 se empezaron a desarrollar las lentes de prescripción y nuestros primeros tratamientos antirreflejantes para lentes minerales. En 1990 iniciamos la internalización del grupo con nuestro laboratorio en Lisboa y se dio un impulso a la automatización de la producción.
“Vamos a disfrutar del 100 aniversario con gran orgullo y esfuerzo”
Hace unos 20 años que empezamos con el desarrollo integral e independiente de las lentes freeform y del cálculo de la lente en posición de uso. Podemos decir que en esto fuimos pioneros en España y de los primeros en Europa.
Paralelamente continuamos con nuestra expansión internacional fundamentalmente en América Latina y ya en 2022 pusimos en marcha en nuestro laboratorio de Madrid un robot de expediciones que, junto con el resto de procesos, la han convertido en una de las fábricas más automatizadas del mundo.
Una larga historia llena de retos superados. La gran ventaja que tenemos para el futuro es aquella de haber ganado mucha experiencia en el desarrollo propio, tanto en los procesos industriales como en el diseño y en cálculo de nuestras soluciones.
¿En su opinión a lo largo de esa larga trayectoria en nuestro sector, cuál ha sido y es la “marca de agua”, el rasgo diferenciador de PRATS?
Francisco Prats. Yo diría que es estar a la última a nivel tecnológico y además con un nivel de calidad y personalización muy importante para poder dar apoyo al cliente de una manera sencilla pero eficiente.
Las empresas con experiencia -que no viejas- se enfrentan a los desafíos de adaptación, a los cambios del mercado y especialmente, en su caso, a la evolución tecnológica ¿Cómo lo ha resuelto su empresa, para mantener su relevante posición hasta la actualidad?
Filipe Pires. Creo que lo puedo resumir en un concepto: total independencia. Somos de las pocas empresas con capacidad de brindar un portfolio tan completo y flexible, adaptable incluso bajo una petición individual especial y distinguida.
Los productos PRATS son exclusivamente nuestros, fabricados en gran parte localmente, y cerca de nuestros clientes. Tenemos laboratorios ultra flexibles capaces de producir el 99% de las lentes necesarias para un óptico, y eso nos parece fundamental. Tenemos productos que cubren todos los niveles y tipologías, desde la gama de entrada a la más premium. De esta manera los clientes que trabajan con nosotros ,tienen todas las posibilidades de corrección óptica a su alcance en el mismo proveedor.
Una vez más, lo importante aquí es independencia y diferenciación. Quien decide trabajar con PRATS sabe que tiene un producto diferente, exclusivo, con servicio ultra eficiente y sobre todo realista. Tanto a nivel de producto freeform como en tratamientos, servicios extras y plataformas informáticas. Es algo que sólo encontrará en PRATS.
Ahora está muy de moda el concepto de negocio “customer céntric” pero ¿desde cuándo viene poniendo en el centro al óptico-optometrista el Grupo Prats, y de qué manera?
Filipe Pires. La compañía lo tiene muy claro. Hoy en día se habla mucho de misión, de visión, de filosofía de empresa, de cultura de empresa, de ADN. Eso lo es todo. Pero para PRATS ha sido siempre así, desde que comenzó.
Yo vengo de un gran grupo internacional, y desde hace 15 años trabajo para PRATS, pero vengo de ese modelo empresarial donde había muchos parámetros para decidir cualquier cambio estratégico o de otro tipo. Aquí es muy diferente. Los accionistas tienen claro que quieren estar en el nivel máximo de tecnología, dar el mejor servicio al cliente, porque el cliente es lo que nos importa y eso lo trasladan a toda la estructura. Por tanto, el personal de PRATS, todo el personal, lo tiene claro.
Si hay que hacer algo es para podernos diferenciarnos. En situaciones podemos dar menor peso a las ganancias, porque lo que queremos es proporcionar siempre las mejores soluciones a nuestros clientes, cueste lo que cueste, este es nuestro fin.
Vayamos a lo actual, a lo casi imprescindible. Sostenibilidad y responsabilidad social. ¿Cómo lidia a este Miura? ¿Cómo resuelve su empresa estas preocupaciones en su modelo de negocio y su día a día?
Francisco Prats. Yo diría que en este tema está presente el espíritu del fundador de la empresa que nos traspasó la obsesión por la calidad y por el cuidado del medio ambiente. Mi abuelo, Alberto Prats era un hombre de campo. Un fanático de lo verde y yo le recuerdo siempre plantando árboles. Cuando comenzó compraba fincas y las llenaba de árboles. De él aprendimos a cuidar el entorno y a contaminar lo menos posible el ambiente. De ahí que todos los sistemas que tenemos de recuperación de energía en cualquiera de las plantas de PRATS, están pensados para generar energía reciclada que no contamina.
Además, sentimos esa responsabilidad social como empresa vinculada a la sanidad. Entendemos que tenemos una misión fundamental: que nuestros clientes, los ópticos, brinden soluciones que permitan que los usuarios vean bien y se sientan bien con sus lentes. Eso nos impulsa a mejorar día a día nuestras soluciones tanto en la parte óptica como estética, con lentes que no pesen, que sean finas y resistentes a las condiciones atmosféricas y de uso.
¿Como líder de un grupo empresarial con cien años en sus alforjas, como ve (y no me responda que, con lentes de PRATS) el medio y largo plazo de su empresa y sector?
Francisco Prats. Hoy en día vivimos claramente con el futuro inmediato, a corto plazo. Es por ello que nuestro desarrollo se enfoca siempre en adelantarnos y prever los cambios para diseñar nuevas soluciones y servicios.
“Los productos PRATS son exclusivamente nuestros, fabricados en gran parte localmente, y cerca de nuestros clientes”
En nuestro mercado hay muchos desafíos: la refracción telemática, la venta por internet, la actualización de las tecnologías en el ámbito retail y sanitario… Todas ellas son realidades que hay que aprovechar para crecer, y quién sabe lo que vendrá en los próximos 100 años
De lo que estoy seguro es de que PRATS seguirá fiel a su ADN, siendo una empresa adaptable y flexible, enfocada en las necesidades de ópticos y usuarios finales, esto nos distinguirá siempre.
¿Qué vais a hacer para celebrar este 100 aniversario y cómo lo vais a comunicar?
Filipe Pires. Vamos a disfrutar del 100 aniversario con gran orgullo y esfuerzo, para que este año sea importante para nosotros y nuestros clientes. A lo largo de 2024 desarrollaremos un plan extenso para promover este gran momento y celebrar esta fecha. No todos los días se celebran 100 años, ni todas las empresas consiguen cumplir 100 años, cuando la media se sitúa en 11 años en España.
Haber llegado aquí nos impulsa para seguir creciendo ya que el legado de la familia Prats nos llena de orgullo. Celebraremos el centenario en la feria ExpoÓptica de Madrid donde presentaremos novedades y sorpresas; desde aquí invitamos a todos los ópticos a que visiten nuestro stand. Vamos también a hacer una pequeña fiesta de celebración reuniendo a algunas personas y sobre todo a los clientes que nos han dado su confianza durante estos años.
Esta entrevista se publicó originalmente en la revista Optimoda correspondiente al primer semestre de 2024.
