Valmond Ópticas, rama de consultoría en Marketing, Comunicación y Desarrollo de Negocio especializada en el sector óptico de Valmond Group, y la Liga Nacional de Graffiti, la competición y colectivo de grafiteros más importante de España, han cerrado un acuerdo para incorporar el servicio al portfolio de la consultora, de la mano de los mejores grafiteros a nivel nacional.
La unión entre arte y marketing no es nueva, pero su aplicación desde la óptica del arte urbano a una función más estratégica y menos preventiva (evitar otros grafitis), es más novedosa. “Se trata de unir arte urbano y estrategia de marketing para que las ópticas de nuestros clientes que buscan un target más joven puedan usar su mismo lenguaje visual, incluso cuando la óptica ya ha cerrado”, explica Juan Boccherini, socio director de Valmond Group.
“Es un servicio diferencial para nuestros clientes de ópticas. Un servicio de valor añadido dentro de nuestra estrategia de 360 grados que, poco a poco, queremos ir incorporando a otros clientes retail del grupo”, apunta Boccherini.
Para Joseba Fernández, director ejecutivo de la Liga Nacional de Graffiti, “trabajar con uno de los actores más destacados del sector óptico nos brinda la oportunidad de acercar el arte urbano a los clientes de las ópticas, así como apoyar a los artistas abriendo oportunidades de remuneración que les permitan seguir creando”.
Este nuevo servicio, bautizado por la consultora como Street Artketing se suma al portfolio de servicios de marketing, comunicación y desarrollo de negocio de Valmond entre los que destacan las campañas anuales personalizadas, marketing digital, branding, desarrollo web, rotulación y escaparatismo.
En este caso se trataría de aprovechar el espacio no utilizado de la tienda, como sería el cierre, o bien el mural exterior, permitiendo llamar la atención y atraer al cliente de manera creativa a la óptica. Incluso se puede aplicar dentro de la tienda a los Young Corners (espacio segmentado de exposición dentro de la óptica que recoge todos los productos y servicios para el público más joven).
Eso sí, como bien advierte el propio Juan Boccherini, “no es un servicio idóneo para todas las ópticas, pero sí es perfecto para aquellas que quieran diferenciarse del resto y tengan como objetivo en su estrategia acercarse al público joven, lo que ahora pueden hacer a través del arte urbano”. “Además – señala Joseba – “es importante mencionar que se trata de graffitis pintados por los mejores profesionales lo que conlleva una calidad muy superior al típico graffiti local”.
Hasta ahora sólo algunas ópticas independientes utilizaban los servicios de grafitis en sus cierres o murales y de manera puntual y preventiva (para evitar pintadas en sus negocios). “El código del grafitero impide ‘pisar’ otro grafiti o mancharlo, por lo que se mantiene la vertiente preventiva, pero sumando la vuelta de tuerca de Valmond: orientar el graffiti a la estrategia y al negocio de la óptica”, concluye Joseba Fernández.