Los acúfenos, un trastorno auditivo crónico caracterizado por zumbidos, pitidos u otros sonidos en los oídos constantes sin una fuente externa, están emergiendo como un desafío creciente para los jugadores de videojuegos. Esta comunidad, conocida por su dedicación y pasión por los juegos electrónicos, se enfrenta ahora a una nueva batalla: la lucha contra los acúfenos, que pueden surgir como resultado de la exposición prolongada a sonidos de alta intensidad durante las sesiones de juego.
Según un estudio reciente de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), se estima que los jugadores de videojuegos de todo el mundo podrían estar arriesgándose a padecer pérdida de audición irreversible o tinnitus. Este fenómeno plantea serias preocupaciones sobre la salud auditiva de esta comunidad, así como sobre los riesgos asociados con la exposición prolongada a niveles de sonido potencialmente dañinos.
Los jugadores deben comprender los efectos negativos de la exposición prolongada a niveles de sonido elevados y tomar medidas para proteger su audición
“Los jugadores de videojuegos están expuestos a niveles de sonido considerablemente altos durante largos períodos de tiempo, lo que puede aumentar el riesgo de desarrollar acúfenos y otros problemas auditivos. Es importante que la comunidad gamer tome medidas preventivas, como el uso de auriculares con cancelación de ruido y tomarse descansos regulares, para proteger su salud auditiva”, informa el responsable de Audiología en Óptica & Audiología Universitaria, Joan Francesc Horvath.
A menudo descrito como una experiencia auditiva constante, el impacto de los acúfenos en los jugadores de videojuegos va más allá de lo físico, afectando también su rendimiento y disfrute del juego. Además, este padecimiento no solo afecta la calidad de vida, sino que también puede tener un impacto significativo en la salud mental y emocional de quienes lo experimentan.
Recomendaciones del experto
Cuanto más tiempo y a más volumen se expone al oído, mayor es el riego de haberle provocado daños. Para evitarlo, se recomienda “tener en cuenta la regla 60/60, que consiste en no estar escuchando un aparato electrónico durante más de 60 minutos a más de del 60 por ciento del volumen máximo”, recuerda Horvath.
En cuanto se detecta este pitido sin fin, el experto de Audiología Universitaria insiste en la importancia de realizar la revisión profesional a la mayor brevedad, para “evitar que se cronifique”.
Además, Joan Francesc Horvath considera importante centrarse en la educación y la concienciación sobre los riesgos potenciales de los juegos para la salud auditiva. Los jugadores deben comprender los efectos negativos de la exposición prolongada a niveles de sonido elevados y tomar medidas para proteger su audición.