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El mes de septiembre suele aprovecharse en los hogares para recuperar hábitos y rutinas tras las vacaciones, sobre todo en los más pequeños, de manera que se retoman determinados cuidados de descanso, alimentación, etc. En este sentido, el equipo de audiólogos de Oticon, especialista en el desarrollo de audífonos, recuerda la importancia de prestar atención también a la salud auditiva de los niños y niñas, ya que cualquier problema puede frenar su desarrollo y aprendizaje y afectar, por tanto, a su rendimiento académico. Por ello, ofrecen unos consejos para cuidarla en estas etapas.

Un estudio elaborado por Oticon concluye que el 62% de los españoles considera que los niños con pérdida auditiva tienen menos posibilidades de aprendizaje y desarrollo. “El desarrollo del lenguaje, así como la capacidad de leer y escribir están muy relacionados con las habilidades de escucha. Por ello, es tan importante cuidar la salud auditiva de los niños y estar pendientes de posibles señales que nos puedan alertar de una pérdida auditiva. Si se diera el caso, es fundamental que las familias conozcan que existen soluciones para que los niños no se pierdan nada en clase y que será necesario consultar con un profesional para que les oriente sobre la mejor solución a seguir para que no afecte a su rendimiento escolar y su calidad de vida en general”, indica José Luis Blanco, jefe de Audiología de Oticon.

El equipo de audiólogos de Oticon ofrece estos cinco consejos para cuidar la salud auditiva de los niños:

Prestar atención a las posibles señales de pérdida auditiva: dependiendo de las edades habrá unos signos u otros. En la etapa infantil se puede manifestar con retraso en la palabra y dificultades en su articulación, trastornos de comportamiento al relacionarse con otras personas, no ser capaces de preguntar y comprender por qué sucede algo, no son capaces de seguir determinadas instrucciones o tienen dificultad para aprender y comprender palabras y frases nuevas con rapidez. Además, hay que tener en cuenta que aquellos niños que son los últimos en responder cuando se pide algo o que miran a sus compañeros cuando se les da una orden o instrucción, pueden tener un problema de audición; por eso estos suelen ser signos que detectan sus maestras o maestros.

Evitar la exposición a ruidos fuertes durante un tiempo prolongado: la exposición a ruidos fuertes durante un tiempo prolongado (juguetes, altavoces, etc.) puede producir daño en el sistema auditivo de los niños y causarles pérdida auditiva permanente. Por eso, es conveniente evitar que estén cerca de la fuente generadora del ruido, hacer descansos en el empleo de determinados juguetes y, en caso de que sea necesario, utilizar protectores del ruido para sus oídos.

No introducir nada en sus oídos y mantener una higiene adecuada: tan importante es mantener una higiene de los oídos de los niños como hacerlo con los elementos adecuados. No se debe introducir ningún objeto en ellos, ni bastoncillos, ni toallitas ni nada que pueda llegar a obstruir el canal auditivo o dañar el tímpano. La limpieza siempre debe hacerse en la parte externa, durante el baño y secando el oído con la toalla.

Realizar revisiones periódicas de su audición: es importante llevar un control de la salud auditiva de los niños, ya que, a determinadas edades, aún pueden no ser conscientes de tener un problema en su audición o no saben manifestarlo. Es frecuente en los niños la aparición de problemas auditivos debido a problemas de oído medio, cuando se producen durante el curso escolar y se extienden en el tiempo pueden dificultar el aprendizaje y ser causa de retraso escolar. Por eso, es recomendable realizar revisiones periódicas con algún profesional especializado en audiología.

Realizar un tratamiento adecuado de las infecciones de oído: diagnosticar y tratar a tiempo las infecciones como la otitis media puede ayudar a evitar la pérdida auditiva o retrasar su avance, por lo que es importante evitar su recurrencia.

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