Una persona recibe aproximadamente 6.000 impactos publicitarios al día. Con esta saturación, una marca bien desarrollada facilita al usuario la decisión de compra cuando adquiere un producto o servicio. Por eso es importante proporcionarle a la marca la importancia que se merece.
- Controla tu historia
La historia detrás de tu marca es tu reputación, por lo que es importante que controles lo que se diga de ti. Si has hecho un análisis DAFO y tienes tus objetivos claros, ahora puedes elaborar una historia coherente que te ayude a comunicar tus logros, valores y objetivos. Las RRSS son una gran plataforma de comunicación, pero no te obsesiones con los números, enfócate en la interacción que tienes con tu comunidad, es lo que te dará un valor real y te acercará a ellos. Pide a tus pacientes que compartan su experiencia contigo y si alguna es negativa, ¡no la ignores! Responde y demuestra que te interesan y eres capaz de enfrentarte a todo tipo de situaciones.
- Date importancia
Cada día mejoramos la vida de alguien, les ayudamos a recuperar aquellos hábitos que estaban perdiendo. Debemos darle valor al trabajo tan valioso que hacemos sin perder la sintonía con tu comunidad. Comunícalo, a través de tu publicidad, el material que entregas a tus clientes, tus canales de comunicación, colaboraciones, etc.
- Se diferente y destacarás
Conocerse a sí mismo es definir el camino que quieres recorrer, y mientras lo haces, hazlo de una forma en que te recuerden. Algo tan sencillo como un color, imágenes, tu presentación, la forma de hablar a tus pacientes, o tu especialidad pueden ayudarte a destacarte entre los demás. Una vez definas lo que te diferencia, sé consistente e inclúyelo en cada pieza de comunicación y en cada contacto que tengas con el usuario.